jueves, 12 de mayo de 2011

Enciclopedia de los Seres de Milos el Viajero - Voladores Parte 2

Fénix

El Ave Fénix es un enorme pájaro envuelto en llamas y de plumaje rojo anaranjado, como el fuego.

Se cree que fue el único animal del Edén que resistió la tentación, lo que le convirtió en un ser eterno.

Este animal simboliza la inmortalidad y la resurrección. Se cree que muere por la noche y renace por la mañana.

El fénix se consume por sus propias llamas cada 500 años. Cuando el fénix ha cumplido su periodo vital construye un nido, que más tarde quema con un golpe de sus plumas. El fénix arde y una vez que se ha convertido en cenizas renace de entre éstas un fénix joven y nuevo.

Algunos escrito lo representan como una criatura con cuello de serpiente, el cuerpo de un pez y la parte trasera de tortuga.


Gorgonas
Una gorgona es una mujer guerrera con alas y mirada petrificante.

Se piensa que las gorgonas eran parte de una raza de mujeres guerreras, aunque sólo se conocen tres; Medusa, Esteno y Euríale. De estas tres gorgonas sólo Medusa era mortal.

Las gorgonas tienen una horrible cabellera formada por serpientes vivas, además tienen colmillos de jabalí, alas de murciélago y el cuerpo cubierto de escamas de bronce. Sus pies y manos son bastante parecidos a unas garras.

La mirada de las gorgonas puede convertir en piedra a cualquier ser que las mire, aunque sea por un breve instante. Además, las serpientes de su cabellera pueden morder e inyectar veneno a medio metro de distancia.


Grifo
Son seres voladores muy feroces, mitad león mitad águila.

Su parte superior es la de un águila gigante, con plumas doradas, un afilado pico y poderosas garras. La parte inferior es la de un león, con pelaje amarillo, musculosas patas y cola. Su tamaño es bastante grande, suelen medir unos 3 metros.

Su comida favorita es la carne de caballo, por lo que es frecuente verlos atacando a caballos y levántandolos en el aire con sus poderosas garras. Los grifos cazan para alimentarse y lo hacen en grupos pequeños de no más de 12 grifos. Pueden combatir en el aire, o lanzándose en picado con el peso de su cuerpo.

Los grifos tienen características de los dos animales de los que están formados. Por parte de las águilas tiene una vista y un olfato muy desarrollados. Su parte de león le lleva a vivir en manadas, dentro de las cuales siempre hay un líder.

Suelen vivir en montañas rocosas, contruyendo sus inmensos nidos en las laderas. Estos nidos están hechos de ramas y hojas.

Pueden ser entrenados como monturas, pero es una tarea que requiere cierto tiempo. Una vez entrenados, los grifos son leales y defienden a su jinete hasta la muerte. Son muy valientes y luchan con toda criatura a la que consideren una amenaza sin pensárselo dos veces. El jinete y grifo quedan unidos de por vida.


Hipogrifo
Los hipogrifos son seres voladores, mezcla de caballo con grifo.

La figura del hipogrifo es conocida desde muchos siglos atrás. Considerados como seres majestuosos, y conocidos por su apetito voraz hacia la carne de caballo.

Es un ser equilibrado y ágil, incluso más que el mismísimo pegaso.

Un hipogrifo es una de las monturas voladoras más rápidas, por lo que ha sido usado con este fin por humanos y humanoides.

La parte equina del hipogrifo lo convierte, quizá, en un ser inferior al grifo, en cuanto a fuerza, pero no en velocidad. Y es que los hipogrifos son realmente veloces en el vuelo, y pueden planear y aterrizar a velocidades vertiginosas y con gran maestría.

Físicamente es como un caballo de color marrón o pardo, con alas de águila y plumaje anaranjado. Sus patas traseras son de caballo y las delanteras de águila. Suele medir unos 2 o 3 metros de largo.

Les gusta vivir en manadas y en lugares con pocas montañas y muchos pastos, y es que el hipogrifo es un ser omnívoro que puede comer tanto carne de caza, como hierba de los prados. La zona habitada por los hipogrifos de una manada se considera su territorio y lo defienden vigilando y planeando desde los cielos.

Al igual que los grifos, los hipogrifos suelen construir un gran nido de paja y ramas en algún árbol o ladera pronunciada. Los huevos de hipogrifo son muy codiciados ya que estos seres pueden ser adiestrados como monturas pero sólo cuando son jóvenes. Una vez alcanzada la edad adulta (3 años), se muestran más reacios a ser domesticados.

martes, 10 de mayo de 2011

Enciclopedia de los Seres de Milos el Viajero - Anexo 3

Dragones Malvados

Dragón Rojo
Los dragones rojos poseen una inteligencia excepcional y un tamaño enorme.

Ambas cualidades los convierten en unos peligrosos enemigos que, además, son inmunes al fuego.

Son típicos de las colinas y las montañas. Sus escamas son rojizas y con el tiempo se hacen duras como si fuesen de metal. Son muy avariciosos y se desviven para incrementar su tesoro.

Suelen vigilar desde lo alto de montañas y colinas lo que consideran como su territorio, aunque este territorio es a veces compartido con los dragones cobrizos y plateados. Sus enemigos naturales son los dragones dorados, a los que consideran su único rival.

Se sienten superiores a casi todos los dragones y al resto de seres, por lo que nunca se plantean si el enemigo es considerable o no. Su arma de ataque es su aliento de fuego, aunque evita usarlo si el enemigo es insignificante. Puede lanzar los conjuros para crear pirotecnias, hipnotizar y para sugestionar.


Dragón Negro
Un dragón negro es un ser de gran tamaño y bastante astuto.

Se les encuentra en entornos cálidos y húmedos como los pantanos. Tienen escamas negras y brillantes, por eso les gusta salir a volar por la noche, cuando pasan desapercibidos.

Tienen la capacidad innata de respirar agua, por lo que se suelen esconder en pantanos a la espera de una buena emboscada.

Estos dragones escupen ácido (al que son inmunes) como método de ataque, y son capaces de de lanzar conjuros para corromper el agua, hechizar a reptiles y producir un crecimiento vegetal.

Sus guaridas están en cuevas húmedas y cavernas subterráneas. Allí les encanta acumular monedas.


Dragón Azul
Estos dragones de escamas azules son característicos de climas áridos y desérticos.

La tonalidad de sus escamas se funde con la del cielo, lo que les da ventaja durante un combate en el aire. Son enemigos naturales de los dragones ocre, que también habitan en los desiertos.

Tienen un gran tamaño y una inteligencia bastante alta, son muy feroces y defensores de su territorio. El desierto les permite vigilar con claridad su entorno, ya que apenas hay obstáculos.

Son amantes de los tesoros, pero sobre todo de los zafiros. Los suelen depositar en las cuevas subterráneas donde habitan.

Tienen capacidad para lanzar conjuros muy interesantes para controlar los vientos, crear agua, crear un terreno alucinatorio e incluso crear un demonio de polvo.

Su aliento es un golpe de rayo eléctrico con anchura de 1,5 metros y 30 metros de largo. Suele atacar a distancia, para poder mandar sus rayos y que el enemigo no pueda actuar contra él. Los dragones azules presentan inmunidad a la electricidad.


Dragón Verde
Los dragones de los bosques poseen una inteligencia y tamaño bastante aceptables.

Sus escamas en el momento de la eclosión son casi negras, pero luego se vuelven verde esmeralda, por lo que se funden en el bosque.

Les encanta jugar a perseguir a su presa, son crueles y buscan siempre la agonía de sus víctimas. Su aliento emana una nube cloro venenoso. Lanza conjuros para respirar agua, provocar enormes crecimientos vegetales y sugestionar a sus víctimas o enemigos.

Sus enemigos naturales son los gigantes de las colinas.


Dragón Blanco
Los dragones blancos habitan en la llanuras, montañas y en climas árticos.

Sus escamas blancas hacen que estos dragones sean casi imperceptibles en la nieve.

Estos seres tienen una inteligencia baja y su tamaño es de los más pequeños, pero aun así son unos excelentes cazadores. Para sus ataques usan el aliento de cono helado capaz de congelar todo lo que se ponga a su alcance. También luchan cuerpo a cuerpo.

Pueden lanzar conjuros para caminar por el hielo, crear una niebla helada y un muro de hielo. Son inmunes al frío.

Sus guaridas se encuentran en cuevas heladas y subterráneas, allí vigilan sus tesoros entre los que suele haber bastantes ejemplares de su piedra favorita; el diamante.




martes, 3 de mayo de 2011

Enciclopedia de los Seres de Milos el Viajero - Anexo 2

Dragones benévolos

Dragón dorado
El dragón dorado es un ser muy poderoso, sabio y de buen corazón que odia las injusticias.


Nos encontramos, posiblemente, ante uno de los seres más inteligentes y poderosos.

Su intelecto es muy superior al de los humanos y pocos seres cuentan con sus características. Estos dragones pueden llegar a medir hasta 50 metros. Tienen unas escamas con motas de color metálico que con el paso de los años se vuelven totalmente doradas.

Tienen la capacidad de respirar agua y de polimorfizarse, además pueden lanzar conjuros para detectar mentiras así como traer suerte y bendecir. Su aliento puede ser un cono de fuego o una nube de cloro venenosa.

El hábitat de estos dragones es muy amplio y pueden sobrevivir en cualquier clima. Sus guaridas están aisladas y hechas de piedras y roca. También pueden vivir en castillos, que son custodiados por gigantes de las tormentas. Estos gigantes y los dragones dorados se ayudan mutuamente.


Dragón plateado
Los majestuosos dragones plateados son, junto con los dorados, los dragones más benevolentes.

Son muy amistosos y colaboradores, no suelen ser violentos y evitan el combate en la medida de lo posible. Tienen unas escamas plateadas muy flexibles que le dan un aspecto metálico.

Su aspecto plateado le hace casi invisible entre las nubes, lo que le da una gran ventaja en combates aéreos.

Su poderoso aliento puede ser un cono de frío o una nube de gas paralizante. Pero un dragón plateado posee además la capacidad de lanzar conjuros como el de caminar por las nubes, crear muros de hielo, controlar el clima e invertir la gravedad. Éste último lo suele usar para lanzar a los enemigos al aire.

Habitan en montañas altas, por lo que comparte entorno con los dragones rojos, de los que son enemigos naturales, aunque también pueden formar sus guaridas entre las nubes.


Dragón broncíneo
Sus escamas son muy brillantes, de color bronce, y su tamaño es más que considerable.

Habitan en climas tropicales y lugares de mucha humedad, como los lagos.

Son amistosos con los humanos y semihumanos, a los que les encanta observar. Para hacerlo se transforma en un animal pequeño ya que tienen la capacidad de polimorfizarse.

Su aliento tiene dos formas; la de rayo eléctrico y la de nube de gas de repulsión. Además, los dragones broncíneos pueden lanzar conjuros para polimorfizarse, crear comida, crear un muro de niebla y controlar el clima.

Aunque sus guaridas son secas, suelen estar situadas cerca de los lagos y de la humedad. Son excelentes nadadores y les encanta bucear para buscar perlas y tesoros. Son también amistosos con otros seres marinos como sirenas, delfines y elfos de mar, aunque no lo son con los piratas, de hecho, los dragones broncíneos destrozan barcos piratas en cuanto tienen oportunidad.


Dragón ocre
Estos dragones son propios de climas muy cálidos, como desiertos y llanuras.

Son inmunes al calor y al fuego. Sus escamas son de un color ocre y con los años se hacen claras hasta que llegan ser del mismo color que la arena del desierto. Son bastante más pequeños que los dragones dorados, pero su tamaño también es considerable.

Su aliento puede ser un cono de gas de sueño o una nube de calor. El calor es tan fuerte que puede ser ampollante. Sus conjuros son capaces de crear o destruir agua, controlar la temperatura, controlar los vientos e incluso invocar a un Djinn.

Son sociables con otros dragones ocres vecinos y con las esfinges, sin embargo, son enemigos naturales de los dragones azules, con los que comparten el desierto.


Dragón cobrizo
Los dragones cobrizos destacan por su especial sentido del humor.


Cuentan chistes constantemente y les encanta oír nuevos acertijos.

Tienen un tamaño grande y una inteligencia bastante desarrollada. Sus escamas son de un tono rojo cobrizo y con los años se van volviendo verdosas.

Durante un combate, saltan de un lado a otro y cuentan chistes para desconcertar al enemigo y que actúe con nerviosismo. Al saltar les gusta hacerlo en superficies irregulares e inaccesibles, por eso busca rocas puntiagudas y si no las encuentra utiliza el conjuro de mover piedras.

Su aliento puede ser una nube de gas de lentitud o una bocanada de ácido. Los conjuros que utiliza son los de mover tierras, neutralizar venenos y crear un muro de piedra.

El hábitat de estos dragones está entre montañas y colinas. Comparte este espacio con los dragones rojos, con los que se lleva especialmente mal por esta circunstancia.